Las ventajas y desventajas del uso de la energía solar
Por ser una fuente abundante y renovable, son muchas las ventajas que ofrece el uso de energía solar. No obstante, las instalaciones solares ubicadas en zonas de ecosistemas frágiles presentan algunos problemas medioambientales, debido a las grandes áreas que tienen que ocupar.
Ventajas
La gran ventaja ofrecida por la energía solar es que, al ser el Sol una fuente de energía inagotable, las instalaciones usadas para su aprovechamiento no llegan a contaminar la atmósfera, pues no tienden a producir gases de efecto invernadero ni contaminan el agua. Además, no producen contaminación acústica, puesto que su generación es totalmente silenciosa.
Otra ventaja que ofrece es su gran disponibilidad. Inclusive en lugares lejanos y que puedan ser de difícil acceso para conseguir energía de otras fuentes, siempre existe la posibilidad de contar con energía solar. De igual forma, sus instalaciones pueden ser tanto pequeñas como grandes, adecuándose a las necesidades domésticas de una vivienda aislada.
Desventajas
Aun cuando son muchas las ventajas que ofrece el aprovechamiento la energía solar, esta también presenta algunas desventajas, entre las cuales se pueden mencionar las que se derivan de los factores astronómicos, que llegan a implicar variaciones en la radiación solar que se recibe en el planeta entre el día y la noche a lo largo de todo el año.
De igual forma existen diferencias generadas por factores geográficos, como es la variación en la recepción de los rayos solares en la superficie terrestre, cuyo ángulo de incidencia puede llegar a ser diferente según la latitud. Asimismo, también llega a influir el grosor de las capas atmosféricas, el cual es diferente en el ecuador y en los polos.
Es así como estos factores llegan a incidir en el diferente aprovechamiento de la energía solar de acuerdo al lugar del planeta. Usar este tipo de energía puede generar también algunos problemas indirectos, como pueden ser los materiales de desechos que pueden quedar después de la fabricación de paneles fotovoltaicos, que son bastante tóxicos.
Las áreas que, se cree, poseen una mejor aptitud para aprovechar la energía solar, por estar localizadas en zonas intertropicales y ofrecer cielos limpios y baja humedad atmosférica, son los desiertos cálidos.
Pero esto puede ser sinónimo de un problema medioambiental, puesto que las plantas solares necesitan de espacios muy grandes, lo que puede afectar los sistemas ecológicos. Las zonas desérticas tienden a ser sumamente frágiles, aparte de producir un gran impacto a nivel visual que es una desventaja para el paisaje.
De igual manera, los sistemas de concentración utilizan grandes cantidades de agua para limpiar los variados elementos de las instalaciones, y en este caso la utilización indiscriminada de agua de pozos llega a afectar gravemente los ecosistemas de las zonas áridas.